lunes, 12 de diciembre de 2011

AA - De regreso: El camino – Black Keys

Black Keys está de regreso con “El Camino”.

Este ha sido uno de los álbumes más esperados de este año, a pesar de ser el séptimo que lanzan, después de que la banda recibiese por primera vez un Grammy por su anterior álbum Brothers.

El sonido de esta banda va evolucionando con cada álbum que sacan y El Camino no es la excepción. Si bien empezaron con un sonido distintivo blues/rock retro sin siquiera esforzarse, ahora han intentado crear varios temas que exploran otros estilos.

Vamos tema por tema:

1. Lonely Boy:
Ya en Octubre había escuchado el primer single del álbum y la emoción no cabía dentro de mí. Lonely Boy es una de esas canciones que te dejan con un buen indicio de que va a ir el álbum, pero sin revelarlo todo. Es un abre-boca perfecto. Con una melodía animada, letras ligeramente arrogantes y un coro pegajoso por parte de Auerbach. Con su "whoa, whoa I got a love that keeps me waiting"esta canción logró entrar a los charts antes de que salga el álbum.




2. Dead And Gone:
Si hay algo que es admirable de este álbum es la continuidad de los temas. Escucharlo en desorden sería un crímen. Buena batería en este track, se repiten los "whoa-ohs" y "na-na-nas" a lo largo de todo el tema. Difícil sacarse esta melodía de la cabeza.

3. Gold On The Ceiling:
Riffs de guitarra bastante buenos con la distorsión necesaria para transportarte a una película de policías. Con bigotes setenteros y ray bans incluídos y por supuesto, en un Chevy El Camino. Apuesto lo que sea a que el próximo año esta canción sale en algún trailer de la típica comedia disfrazada de película de acción.

3. Little Black Submarines:
Esta canción definitivamente marca el climax del álbum. Empieza suavemente con una melodía blues-folk y un fingerpicking calculado por parte de Auerbach. Hasta que empieza la distorsión con un buen strumming y se genera un sonido mucho más fuerte y destructivo digno de un grito de guerra. "But everybody knows, that a broken heart is blind".

4. Money Maker:
A partir de esta canción retomamos un poco del estilo original de The Black Keys. "Oh, she wants milk and honey / Oh, she wants filthy money." Mucha potencia en guitarras y voz. Se aprecia un drum beat más agresivo. No necesariamente la canción que los va a llevar a los charts, pero definitivamente nos recuerda por qué los amamos.

5. Run Right Back:
Este tema es impecable, con un slide de guitarra perfecto y un ritmo que te engancha. Regresa la influencia blues y rock de álbumes anteriores. Definitivamente es la obra maestra de este álbum. No hay palabras para expresar la calidad de este tema.

6. Sister:
Carney le da duro a la batería, mientras Auerbach le mete la cantidad justa de efectos con la guitarra para crear una pista bien condimentada. Tiene un sonido un poco oscuro, sin embargo mantiene un sonido de rock clásico muy necesario para el álbum.

7. Hell Of A Season:
Esta canción es más pop que las anteriores. Empieza con un sonido algo siniestro, un poco repetitivo, pero va ganando encanto mientras va más a prisa. Finaliza lenta, con una vibra reggae. La letra remata con un ultimátum bien merecido para quien sea dedicada.

8. Stop Stop:
Tiene un estilo mucho más funk que las demás canciones. Es increíblemente pegajosa con su "yeah, you gotta stop, stop can't you hear me call" y dentro del álbum logra resaltar como el track más refrescante de todos.

9. Nova Baby:
Otra canción que resalta del álbum. En mi opinión esta canción es un acierto en todos los sentidos. Una melodía pegajosa sin llegar a ser común. La letra te golpea en la cara con una verdad ineludible "All your enemies smile when you fall / Take it 'cause you don't know what you want".

10. Mind Eraser:
A los 10 segundos de canción ya te has dado cuenta de que te espera algo bueno. Una canción mucho más "sucia" que las demás. Al fin, Los Black Keys vuelven a su original Blues que durante 6 álbumes habían logrado perfeccionar. Una canción más lenta, que se deja escuchar con el mayor placer posible.

En general, el álbum es mucho más digerible que los anteriores. Con 37 minutos de duración, varían bastante bien entre su sonido caracterísitco retro blues/rock y los intentos de alejarse de esto. Mantienen el estilo de liricas directas a la vena de álbumes anteriores, mientras experimentan. El álbum empieza bien, se pierde un poco durante un par de temas, pero se encuentra a si mismo al instante y te abofetea con su excelencia, por haber dudado si era capaz de hacerlo.




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